Numerosísimos fieles se han despedido de monseñor Agostino Zheng Shouduo, primer obispo de la prefectura apostólica de Kiangchow, en la provincia china de Shanxi, fallecido a los 89 años en julio de 2006.
Murió en su circunscripción eclesiástica el pasado 16 de julio tras una larga enfermedad, según confirmó el 3 de agosto Radio Vaticano.
Había nacido el 17 marzo de 1917. Fue ordenado sacerdote en 1949; la consagración episcopal la recibió en 1982. Condenado en 1964 como «contrarrevolucionario», el entonces sacerdote pasó 15 años en trabajos forzados, apunta la emisora pontificia.
En aquel periodo su fortaleza de ánimo, honestidad y humildad fueron admirados por todos.
Al conocer su fallecimiento, más de mil fieles se reunieron en una vigilia de oración. Los funerales por su eterno descanso se celebraron a los nueve días de su muerte en la iglesia de la Inmaculada Concepción; participaron algunos obispos de la región y medio centenar de sacerdotes. Igualmente estaban presentes algunas autoridades gubernamentales con las que el prelado había mantenido una relación clara y cordial, observa «Radio Vaticana».
Los que conocieron a monseñor Zheng Shouduo le recuerdan como un hombre cordial y abierto al diálogo. Se ocupaba mucho de la formación de los sacerdotes y de las religiosas. Su vida espiritual se caracterizaba por una gran humildad y una profunda devoción a la Virgen María.
La prefectura apostólica de Kiangchow que pastoreaba, de una extensión de 17 mil kilómetros cuadrados, suma actualmente más de 10 mil católicos, en su mayoría campesinos. Se trata de una comunidad fuertemente comprometida en obras sociales, en hospitales y dispensarios.
Los sacerdotes locales son 29, de los cuales 27 fueron ordenados por el obispo fallecido. Las religiosas son unas cuarenta, pertenecientes a la congregación diocesana Pu Zhao, fundada por el mismo prelado.