El Cardenal Angelo Comastri presidió el pasado día 26 la celebración eucarística para conmemorar el centenario del nacimiento de la beata en la iglesia de San Lorenzo en Roma, ante unas cien misioneras de la caridad, más de 20 sacerdotes, líderes del gobierno local y un nutrido número de fieles.
La misa fue concelebrada por el Prefecto de la Congregación para los Obispos, el Cardenal Marc Ouellet, quien leyó un mensaje del Papa al comienzo de la Misa.
En su homilía, el Cardenal Comastri recordó un encuentro personal con la fundadora de las Misioneras de la Caridad cuando él era un joven sacerdote. Contó que le dirigió una carta después de ser ordenado sacerdote y la respuesta le sorprendió, porque estaba escrita “en un papel muy pobre, en un sobre muy pobre”.
“Prométame que hará media hora diaria de Adoración al Santísimo”
Tiempo después, el Cardenal Comastri la fue a ver cuando se encontraba de visita en Roma, para agradecerle la respuesta. Cuando se encontró con ella, la Madre Teresa le hizo una pregunta que lo dejó “un poco avergonzado”. “¿Cuántas horas al día reza?”, le preguntó.
Entre 1969 y 1970, recordó, la Iglesia pasaba por una época “conflictiva”, por lo que considerándose “casi un héroe”, el entonces padre Comastri le explicó que rezaba la Misa diaria, la Liturgia de las Horas y el Rosario.
La Madre Teresa le respondió rotundamente: “Eso no es suficiente”. “El amor no puede ser vivido de forma minimalista”, le dijo, y le pidió que le prometiera hacer media hora de adoración cada día. “Se lo prometí”, dijo el Cardenal Comastri, “y hoy puedo decir que esto salvó mi sacerdocio”.
En esa ocasión, tratando de defenderse, le dijo a la Madre Teresa que pensaba que ella le iba a preguntar cuánta caridad hacía. Ella le respondió: “¿Y crees que si no rezara yo sería capaz de amar a los pobres? Es Jesús el que pone amor en mi corazón, cuando rezo”. El Cardenal Comastri concluyó que “a través de esta pequeña mujer… se nos recuerda que la caridad es el apostolado de la Iglesia, y que la caridad sólo nace si rezamos”.
Fuente: Aci/Infocatolica