Beato Karl Leisner, ordenado sacerdote clandestinamente en el campo de prisioneros de Dachau
Durante la Segunda Guerra Mundial, los nazis atacaron de manera despiadada a los católicos porque veían a la Iglesia Católica como un serio obstáculo, especialmente tras la condena del Papa Pío XI al nacional-socialismo en la encíclica Mit Brennender Sorge del 14 de marzo de 1936.
Karl Leisner nació el 28 de febrero de 1915 en Rees (hoy en el Estado de Renania del Norte-Westfalia, en Alemania), y vivió casi toda su vida en Cléveris, en el mismo Estado. En su familia recibió una buena formación católica, y fue un buen estudiante. En su ciudad fue uno de los promotores de la asociación cristiana de jóvenes Saint-Wernery. A partir de entonces, comienza unas actividades propias de la edad: salidas en bicicleta, acampadas, fuegos de campamento, y todo ello en un ambiente lleno de valores cristianos.